Experiencias únicas

He tenido la enorma suerte de poder trabajar en el Hotel Villa Padierna, Marbella: un lujoso, exclusivo y elegante complejo de cinco estrellas Gran Lujo en la Costa del Sol gestionado por la prestigiosa cadena hotelera Ritz-Carlton. Hace tres años que empezé a trabajar de camarera en uno de los tres restaurantes que ofrece, La Loggia, y desde entonces he trabajado en estos tres espacios gastronómicos, en el departamento de banquetes y como coordinadora de Relaciones Públicas. Tengo muchísimas cosas que contaros sobre el Hotel que me enamoró el primer día que lo ví y el cual alimenta mi amor cada vez que camino por él, así que ésta no será la única entrada que le dedique.

Inspirado en un palacete de la antigua Toscana romana, el Hotel Villa Padierna dispone de 118 habitaciones y once villas, decorado con estatuas clásicas, tapices y antigüedades. Rodeado por los campos de golf Los Flamingos y Gran Flamingo, ambos de 18 hoyos, el Hotel ofrece como ya he comentando tres espacios de restauración: La Loggia, con una comida más internacional; La Veranda by Martín Berasategui, para degustar una cocina refinada que fusiona las recetas vascas y los aromas del sur de manos del renombrado chef de tres estrellas michelín y su talentoso aprendiz, Víctor Taborda; y La Pérgola, situado en el entorno de la piscina y rodeado de jardines y pérgolas para disfrutar de los mejores cócteles y aperitivos en la temporada de verano.

Recientemente se han inaugurado “Las Casitas del Hotel Villa Padierna”, once villas y tres suites exclusivas que conforman el espacio de máxima expresión de lujo en el sur de España.
Diseñadas para crear experiencias únicas, estas nuevas estancias de hasta 350 metros cuadrados, disponen de un espacioso salón con chimenea, kitchennette, amplias terrazas con piscina privada y uno o dos dormitorios, todo ello equipado con las últimas tecnologías .

Como servicios especiales, ofrecen mayordomo 24 horas y una zona VIP con degustaciones durante el verano,además de entradas para conciertos en el anfiteatro (con capacidad para 400 personas) y circuitos termales en el Thermae Spa (ya os comentaré más sobre este espacio ¡Hay mucho que contar!). Todo ello lo hacen para que el huésped se sienta como en su segunda residencia, pero con la ventaja de poder beneficiarse de todos los servicios propios de un hotel de Gran Lujo.

Más adelante os seguiré contando cosas sobre esta maravilla de hotel. Visitar la página web y conocerlo, ¡vais a desear visitarlo!

http://www.hotelvillapadierna.com/